Por primera vez esta temporada, Álex Moreno salió al césped desde el banquillo

Si ha habido un jugador inamovible en el once del Betis en el tramo inicial de la temporada, ese ha sido Álex Moreno. El lateral zurdo, que ha llegado a ser el futbolista con más minutos de la plantilla, no sólo era fijo en las alineaciones de cada partido, es que hasta el choque ante el Villarreal, sólo se había perdido 15' frente a la Real Sociedad. Pero un esguince de tobillo le hizo salir del terreno de juego en el descanso ante el cuadro 'groguet' y perderse el estreno copero del equipo ante el UCAM Murcia.

Álex Moreno saltó al césped desde el banquillo, por primera vez este curso

Se recuperó a contrarreloj del esguince de tobillo, entrando en una convocatoria sólo una semana después de sufrir la lesión, pero Manuel Pellegrini fue cauto y no quiso forzarle en dos choques que tenían pocas horas de diferencia entre sí, ante Granada y Cádiz. Frente al Levante es posible que hubiera tenido minutos, pero dar positivo en Covid-19 en las horas previas al desplazamiento al Ciutat de Valencia le privó de disputar este encuentro, y también el 'Gran Derbi', además de la eliminatoria en Copa del Rey ante el Mutilvera.

Pasado el periodo de cuarentena, y tras dar negativo en dos test, pudo volver a los entrenamientos con sus compañeros a algo más de 48 horas del duelo contra el Huesca, y con tan sólo dos sesiones con el grupo en sus piernas, se desplazó hasta El Alcoraz, pero como era de esperar, Pellegrini tampoco quiso forzar y prefirió esperar hasta el compromiso en El Molinón-Enrique Castro "Quini" para dejarle formar parte del once y permitirle disputar los 90 minutos. Dejó buenas sensaciones en Gijón, sin mucho trabajo en defensa pero siendo solvente en cada acción y aportando en cada jugada de ataque que intervenía, poniendo incluso en bandeja a Juanmi Jiménez un centro que podía haber acabado en un 0-3 en el tramo final del encuentro, pero que el malagueño envió fuera.

Frente al Celta, en el duelo que cerraba la primera vuelta de Liga para el Betis, después de disputar los 90' tan sólo tres días antes en el que fue su regreso a los terrenos de juego un mes después de su lesión, le tocó esperar su oportunidad desde la grada, y sin apenas calentar, saltó al césped en el 82', en una demarcación diferente a la que suele ocupar las últimas ocasiones, entrando como reemplazo de Diego Lainez, colocándose como extremo izquierdo. Pellegrini optó por el doble lateral en banda izquierda para aguantar el resultado, pero el chileno tampoco quería conformarse con el 2-1, y buscó sentenciar el partido aprovechando la velocidad, desborde, cambio de ritmo y regate que Álex Moreno puede aportar, un excelente revulsivo cuando la situación lo requiere, como lo demostró más de una vez durante su estancia en el Rayo Vallecano, y más con los contrarios ya agotados tras casi todo el partido sobre el verde. Como de costumbre, en los pocos minutos que tuvo, se ofreció, participó en algunas acciones de ataque que no acabaron como se esperaba y también estuvo solidario en defensa, retrocediendo para ayudar a sus compañeros. El técnico trató de sacar fruto de la polivalencia de un jugador que siempre está dispuesto a cumplir con lo que su equipo necesite.