Alessio Lisci logra tres puntos en un partido marcado por golazos

Alessio Lisci introdujo varios cambios en el once para enfrentarse al Andorra en la jornada cinco respecto a los futbolistas que empataron en Huesca la semana anterior. Uno de los más significativos ha sido la presencia de Ramón Juan bajo palos, quien aún no había tenido minutos en partido oficial esta temporada 2023-2024. El que por el contrario ha seguido con su papel de titular ha sido Gabri Martínez, el encargado de inaugurar el marcador con un gol repleto de calidad y confianza definiendo a la perfección en el mano a mano después de una jugada individual que empezó en el centro del campo. Se marchó en velocidad, se deshizo de sus rivales, y consiguió batir la portería de Nico Ratti en el 32'. Un gol que daba calma y tranquilidad, pero 10 minutos después llegó el tanto de Carlos Martín; un remate espectacular desde el pico del área que pegó en un rival y fue hacia dentro. 2-0 antes del descanso, recital del Mirandés durante la primera parte, y la grada de Anduva respondía y animaba ante el gran juego del equipo.

Alessio Lisci logra la victoria en un partido repleto de fútbol y goles impresionantes

Pero a esa fiesta aún quedaban muchos ingredientes por añadirle, y para ello estaba la segunda mitad. En el 66', Diego Alende quiso amargar levemente la felicidad contagiosa que se respiraba en Anduva, y con un zapatazo imparable desde fuera del área puso el 2-1. El fútbol era lo que reinaba sobre el césped, y era puro espectáculo ver este duelo entre Alessio Lisci y Eder Sarabia, dos técnicos de presente y un futuro prometedor, pero aún faltaban golazos que harían vibrar muy fuerte los corazones de los aficionados de ambos equipos. En el 87', Alan Godoy trató de devolver la tranquilidad a la hinchada de Miranda de Ebro, y se atrevió con un disparo impresionante, y que posiblemente sea el gol de la jornada, desde medio campo aprovechando un despiste de Nico Ratti. 3-1 y la marea rojilla volvía a sonreír a la vez que se llevaban las manos a la cabeza al ver cómo había entrado ese balón desde tanta distancia pero colocado de una manera espectacular, pero esta calma iba a durar poco tiempo.

Llegó el añadido, y no es nada fácil anotar tres goles en menos de 10 minutos, pero Mirandés y Andorra lo lograron para ofrecer un espectáculo a la altura de lo que podría ser uno de los mejores partidos de la temporada 23-24 de LaLiga Hypermotion. Iván Gil y Diego Pampín acabaron con la ilusión rojilla por momentos cuando sus goles cambiaron el marcador por completo, pasando a ser un 3-3 en el 93'. Pero Alessio Lisci es un entrenador acostumbrado a trabajar en la adversidad, a darle la vuelta a situaciones muy negativas, y esa mentalidad de luchar hasta el final que les inculca a sus jugadores día tras día, siendo un gran experto en manejar el talento de los jóvenes, tuvo sus frutos. Alberto Reina recuperaba la posesión en el 98', para dar lugar a una jugada entre un tan exhausto como comprometido Gabri Martínez, y un Carlos Martín que está en un estado de forma increíble, para rematar con un taconazo certero del canterano del Atlético de Madrid, en la que podía haber sido la última acción del duelo, pusieron el definitivo 4-3. 

Anduva estallaba de felicidad, los jugadores celebraban este gol que significaba una victoria agónica, pero trabajada y merecida de principio a fin. Este triunfo sirve para romper una racha de tres partidos sin ganar, pero además son tres puntos que ayudan a conseguir confianza como grupo, como bloque. En el combinado rojillo hay mucha calidad, mucho esfuerzo, y muchas ganas de demostrar y luchar por un objetivo. Todo comandado por un técnico que está debutando en la categoría de plata, Alessio Lisci, que no sólo sabe muchísimo sobre fútbol y táctica, y sobre cómo manejar situaciones adversas, revertirlas, es que además trata de mejorar, reinventarse y aprender y crecer cada día. En Miranda de Ebro van a disfrutar y también sufrir por momentos, porque la Segunda División es muy exigente, pero van a vivir muy de cerca el desarrollo de un entrenador que está llamado a dejar mucha huella en el deporte rey. Esto solo es el principio, aunque tiene detrás una trayectoria cuanto menos ilusionante. En la tarde del domingo 10 de septiembre, ha quedado más que patente el espíritu de lucha y de cómo defender un escudo que trata de transmitirle a una plantilla repleta de talento, y es que sobre el césped se vio a verdaderos jabatos.

En la rueda de prensa posterior al partido, a pesar de la victoria, se pudo ver a Alessio Lisci enfadado por lo ocurrido en el añadido. Marcar cuatro goles es muy positivo, pero no tanto si a la misma vez se encajan tres dianas, quedando contra las cuerdas en los últimos compases del encuentro. Precisamente esa autocrítica, siempre buscar la mejor versión y corregir errores, hace y hará que todos y cada uno de los jugadores del Mirandés saquen lo mejor de ellos mismos, todos compitan y luchen en la misma dirección y con el mismo objetivo, y hagan disfrutar a una hinchada que en esta ocasión se ha marchado a casa con el corazón contento, pero vibrando a mil por hora en los últimos minutos. Puro fútbol, pura competitividad y pura garra la que se ha respirado en Anduva en la tarde del domingo 10 de septiembre. La magia del deporte rey y de LaLiga Hypermotion: una categoría exigente, y donde se pelea hasta el último segundo.