El Mirandés de Alessio Lisci dominó y venció al Albacete en Anduva

La visita del Albacete al Mirandés significaba que en Anduva se viviría un duelo de emociones fuertes en la tarde del domingo 15 de septiembre. Alessio Lisci no se fiaba de la mala racha de los manchegos, como aseguró en la previa del encuentro, y dejó claro que era un equipo que en cualquier momento podía cambiar el partido. Pero con la humildad necesaria, con un grandísimo trabajo táctico y de grupo, y sacando lo mejor de una plantilla que parece entender a la perfección lo que quiere el preparador italiano de ellos, el técnico del cuadro jabato sacó sus mejores armas sobre el terreno de juego. Con un 5-3-2 que le está brindando grandes prestaciones en defensa, pero defendiendo en un bloque más bajo de lo habitual, sus futbolistas fueron ganando metros hasta dominar a los dirigidos por Alberto González.

Alessio Lisci gana la partida a Alberto González y logra una nueva victoria en Anduva

Muy ordenados y atentos en todas las líneas, y defendiendo en grupo con mucho criterio ante cualquier mínima intención del Albacete, también tenían capacidad para ir ganando protagonismo en ataque y tratando de inquietar a la zaga manchega. Y no tardaron demasiado en ponerse por delante en el marcador. En el 18', en una jugada rocambolesca en la que varios de los jabatos tocaron la pelota en el área, el último en hacerlo fue Urko Izeta, quien puso el 1-0 a favor de los locales en la primera oportunidad clara. El 2-0, después de mucha insistencia por parte de los de Alessio Lisci buscando el tanto de la tranquilidad, lo anotó Joaquín Panichelli, que se quedó delante del Raúl Lizoain, y el delantero cedido por el Alavés encontró su recompensa tras no dejar de correr en ningún momento del encuentro, marcando en el 85', tras un pase de Alberto Reina que el ariete remató de cabeza.

Anduva celebró y mucho este gol de Joaquín Panichelli, y es que no solo era el tanto que prácticamente certificaba una nueva victoria (2-0), significaba seguir alargando una racha espectacular para el Mirandés. En las cinco primeras jornadas de LaLiga Hypermotion, los rojillos han logrado tres empates, dos triunfos, ambos ante su afición, cuatro porterías a cero, y son el equipo con menos goles recibidos por partido. Los de Miranda de Ebro, que hace unas semanas aún estaban completando su plantilla, continúan invictos en una competida y complicadísima Segunda División. Los jugadores se están dejando todo en el campo, pelean cada balón como si fuera el último, son un bloque sólido y casi infranqueable en defensa, y apoyados en la tranquilidad que transmite Raúl Fernández en portería, junto a la garra que tiene la plantilla arriba, y la calidad presente en el centro del campo, Anduva está en estado de 'feliscidad'.

'Feliscidad' precisamente porque el gran responsable de todo esto es un Alessio Lisci que cada fin de semana ocupa el banquillo para dirigir a su equipo, pero que cada día, tanto él como su cuerpo técnico, se dejan la piel en cada entrenamiento para conocer a los jugadores, su polivalencia, cómo hacerles sacar su mejor versión tanto a nivel individual como para encajarles a la perfección en sus esquemas según las circunstancias y el rival, haciendo un grupo solidario, entregado, y con mucha ambición. La carrera del técnico italiano en el fútbol nunca ha sido fácil, siempre le han tocado retos complicados, y cuando todo se pone cuesta arriba, él se crece, y así lo está demostrando una vez más. Con una plantilla repleta de jugadores que hace poco han aterrizado en Miranda de Ebro, pero que se están adaptando a la perfección a su modo de trabajo, a su forma de entender y transmitir el fútbol, y están siguiendo su ejemplo de que el trabajo nunca miente.

Aunque el Mirandés en estas primeras cinco jornadas está sorprendiendo y para muy bien, Alessio Lisci lo tiene claro. Quiere mantener la humildad, seguir con los pies en el suelo, porque esta categoría es muy larga, muy igualada y donde todo puede ocurrir. El entrenador no quiere relajaciones, es hora de seguir trabajando, seguir progresando, y seguir remando todos en la misma dirección para luchar y dar mucha guerra en esta Segunda División.